A los 18 años, mientras observaba a su padrino, quien es cirujano, realizar una operación, Luis “Rinty” Escolá supo lo que quería hacer el resto de su vida. Su plan no se quedó en eso, ya que pasó de la abstracción a la realidad cuando en 2014 logró finalizar esa especialidad dentro de la medicina. Antes de exponerse a la que sería su pasión en la sala de operaciones, Escolá ya había puesto su enfoque en práctica destacándose como bodyboarder, una forma diferente de relacionarse con el cuerpo y sus secretos
Como bodyboarder el Dr. Rinty Escolá consiguió ubicarse en el quinto lugar en su categoría de la Federación de Surfing de Puerto Rico, cuando tenía 17 años. Corro boogie desde los 8 años y competí hasta los 21. De vez en cuando saco mi tabla de surfing a pasear, pero para mí el boogie es mejor”, señala. Más adelante, mientras estaba en la Escuela de Medicina del Recinto de Ciencias Médicas, en Río Piedras, la falta de tiempo debido a los rigurosos horarios le impidió continuar practicando como acostumbraba el voleibol y el baloncesto, deportes que conoció mientras estudiaba en el Academia Perpetuo Socorro. La necesidad de encontrar una forma de ejercitarse que pudiera acomodar en su tiempo le hizo comenzar a visitar más a menudo el gimnasio para levantar pesas. No fue suficiente realizar ejercicios para mantenerse en forma, sino que este nuevo interés lo llevó a participar en varias ocasiones, entre 2002 y 2010, en competencias de fisiculturismo en las que siempre consiguió llegar entre los primeros tres lugares. “Yo he hecho múltiples deportes desde los cinco años, pero cuando estaba estudiando en la universidad no podía jugar basket o volley, y solo seguía surfeando y alzando pesas. Me envolví y acabé compitiendo en fisiculturismo. Ya no hago este tipo de competencias, pues se me dificultó al comenzar a hacer las guardias de la especialidad en cirugía”, explica quien a sus conocimientos en medicina añade lo aprendido en el ámbito del fisiculturismo. “Lo que sé lo comparto y ayudo mucho a la gente a perder peso. A los que están ya en un peso saludable, les brego con rutina de pesas y les ayudo con su nutrición”, revela quien se describe como metódico, cualidad que sin duda dirige sus ganas, para que estas no se queden solo en eso.
“Tengo una personalidad de tipo OCD (Desorden Obsesivo Compulsivo, por sus siglas en inglés), pero no en su parte negativa, que es un desorden que tiene que ser tratado. Sin embargo, yo tengo un protocolo para todo, me gusta hacer las cosas a mi manera y siempre que empiezo algo lo termino. Todo tiene que estar perfecto, me gusta todo en su espacio y con una simetría”, dice el Dr. Escolá, quien se desempeña como cirujano en el Hospital Pavía de Arecibo y en Centro Médico, y tiene oficinas en esos centros hospitalarios y en Metro Pavía, en Carolina.
“La única razón por la que estudié medicina fue para ser cirujano. Antes de estudiar fui a sala de operaciones a ver mi padrino, el Dr. Miguel Echenique, operando y encontré bien retador tener las manos dentro de otra persona. Tenía 18 años, pero desde ahí supe qué es lo que quería hacer y continué hasta que lo conseguí”, dice quien también tuvo como mentor y figura guía al Dr. William Méndez.
Hoy, el joven criado en Miramar tiene una especialidad en cirugía general y una subespecialidad en cirugía bariátrica, esta ultima de la Universidad de Texas en Houston y que cae bajo el renglón de cirugía mínimamente invasiva, pues realiza este procedimiento a través de laparoscopia y cirugía robótica. Es en el campo de la cirugía bariátrica donde Escolá ha puesto su enfoque. “En algún punto, me gustaría lograr desarrollar un centro de excelencia bariátrica, lo que significa que está aprobado por las comisiones porque se opera un alto volumen de casos bariátricos al año con un porcentaje de complicaciones por debajo de lo esperado. Lograr completar eso, por ahora, es mi meta más grande en el campo de la cirugía”, explica quien desea continuar dando sus conocimientos en su tierra, mas reconoce que hace falta mucho caminar para que Puerto Rico esté a la par de otros lugares en este tipo de procedimiento.
“Aún lo veo bien atrás. Por ejemplo, aquí hay hospitales donde se podrían hacer diez casos al día, pero prácticamente no se hacen, no por falta de destrezas ni por los profesionales del País, ya que estamos todos muy capacitados. Las cirugías bariátricas están atrás en la parte administrativa: la metodología para aprobar la cirugía, la manera en que se hacen los procedimientos y la burocracia absurda que hay para hacer el pago debido por los servicios de un cirujano”, añade el creador de Health and Facial Cosmetics, clínicas de control de peso y de cosmética facial.
A su ya muy ajetreada agenda cotidiana, que incluye viajes constantes entre sus prácticas médicas en San Juan y Arecibo y que comienza a las 6:30 de la mañana, el Dr. Escolá añade sus intervenciones —cada martes, a las 8:30 a. m.— en Radio Joe (106.1 en la banda FM), en las que aborda temas de medicina, cirugía, pérdida de peso y cosmética. De la misma forma saca tiempo para viajar a surfear y compartir con su compañera, “quien me apoya 200 por ciento en cada cosa que hago”.
Por: Lorna Zayas Rodríguez