Fuentes próximas al director Guy Ritchie aseguraron al New York Post que Rocco, hijo de Madonna y Guy está cansado de seguir a su madre de concierto en concierto y que no soporta la vida controlada que lleva en Nueva York donde no tiene la libertad para entrar y salir que sí tiene en Londres con su padre. El adolescente se ha quejado de la disciplina que le impone su madre,desde la estricta dieta a la prohibición de tocar la guitarra por las noches.
Rocco, quien se ha mostrado como un adolescente tenaz y con las ideas muy claras, tendrá que decidir la próxima semana dónde y con quien quiere vivir, y parece claro que no será con su madre. Madonna y su hijo se verán las caras el 3 de febrero.