Por Isabel Palou
El talentoso chef Martín Louzao encuentra el balance perfecto entre lo tradicional y lo mundial. En su “Cocina Abierta” exalta sabores y combinaciones inesperadas para crear una experiencia como ninguna otra. Buscando impactar los cinco sentidos, el colorido local en Condado es llamativo a los ojos desde el primer encuentro.
“La gastronomía es el único arte que se puede percibir y disfrutar desde los cinco sentidos”, esta oración demuestra la inspiración y énfasis en su cocina que el chef Martín Louzao infunde en Cocina Abierta. La puerta amarilla de la entrada y los colores llamativos verdes y rojo causan que el primer sentido, la vista, cause la primera experiencia de este restaurante. Un menú basado en “actos” intenta crear una serie de etapas en la comida como si esta fuera una obra teatral. Cada acto consiste de platos diversos inspirado por muchísimas culturas alrededor del mundo. Con el propósito de “aprender sobre diferentes culturas en una perspectiva gastronómica”, como el propio chef describe, Cocina Abierta empieza su primer acto con opciones como unas croquetas de jamón serrano y queso manchego o un carpaccio de plátano con tataki de atún. Este plato mezcla sabores dulces como el plátano con aguacate y tuna fresca lo cual crean una combinación completamente inesperada pero a la misma vez suculenta. El segundo acto incluye opciones como un salmón relleno de setas, encima de un risotto de remolacha y maíz ahumando. El tercer y cuarto acto contiene opciones de carnes o aves como por ejemplo: unos tacos de pato cubierto con un pico de gallo de uvas y naranjas, o también unas costillas cocinadas a fuego lento con una salsa de Malbec encima de una crema de maíz. Cocina Abierta lleva su nombre dado a una búsqueda de evitar lo aburrido y común. Chef Louzao quería unir la iniciativa, energía e inspiración cultural de todas partes del mundo para una experiencia completamente innovadora y excelente dentro de su restaurante.
Con el propósito de “convencer a los incrédulos o aquellos que no quieran experimentar la magnitud de la gastronomía” chef Martín Louzao mezcló toda su experiencia y conocimiento cultural dentro de un menú variado y delicioso. Este menú es apto para toda persona y gustos dado a sus extensas opciones de carnes, pescados, aves y también opciones vegetarianas.
Aunque sí busca el dinamismo y al diversidad en sus platos, también se basa en la tradición. Otra rama de su plan “Cinco Sentidos”, lo es el restaurante Nonna Cuccina Rustica, ubicado en la calle San Jorge, que se basa en ese aspecto de tradición. Con el nombre italiano de “abuela”, Nonna busca resaltar platos increíbles con un toque de familiaridad y costumbre.
Este chef tiene un futuro brillante, con ideas y proyecto innovadores. “Touro”, es también otro restaurante que está por venir. Se basa en destacar el “contacto con la tierra y los productos que se crean de esta misma” mediante el crecimiento de los propios ingredientes que se usarán y manteniendo la frescura y lo orgánico en los platos. También, chef Martín Louzao tiene un proyecto que será una extensión de Cocina Abierta; un atelier en la parte trasera del restaurante le permitirá a las personas la oportunidad de aprender sobre la gastronomía directamente con el chef. Manteniendo lo emprendedor, innovador pero igualmente la tradición mediante degustaciones, clases y menús exclusivos por noches, el “Atelier” de Cocina Abierta será un proyecto digno de esperar y formar parte de él.
El chef Martín Louzao junto a sus proyectos y extensiones de “Cinco Sentidos” ha elaborado una experiencia única y excepcional dentro de todos sus aspectos. Definitivamente encontró el balance perfecto entre lo revolucionario, lo tradicional y lo mundial en un aspecto gastronómico.
Entendiendo el concepto de los cinco sentidos, Cocina Abierta logra capturar el ojo con su aspecto vivo y energético. Logra que los gustos saboreen y que el tacto sea impactado por comida inesperada y perfectamente combinada. A la misma vez, al olfato le entra un aire de calidad y delicia. Finalmente, Cocina Abierta logra que la gente exprese a los oídos muchísimas risas y exaltaciones sobre una comida y un ambiente extraordinario.